Casariche pone en marcha la novena edición de El Placer de Leer

La Delegación de Juventud del Ayuntamiento de Casariche ha iniciado ya la novena edición del programa «El placer de leer», un proyecto de la Diputación de Sevilla que se desarrolla en los municipios sevillanos y cuya intención es «acercar a los jóvenes al placer de sumergirse en la lectura.» En esta edición, el Ayuntamiento casaricheño ha informado que «se cuenta con “Fuego Azul”, un libro que combina la literatura fantástica y de aventuras con la histórica, y que adentrará a los jóvenes lectores en un mundo en el que los valores de la convivencia y la tolerancia llevarán a un grupo de jóvenes a vivir una aventura maravillosa.»

Este programa se desarrolla por parte del Consistorio «en estrecha colaboración con el IES Atalaya, la orientadora del mismo y el Departamento de Lengua, y está dirigido a 27 alumnos de 3º y 4º de diversificación curricular».

Además de las actividades de dinamización que se vayan realizando a lo largo del mismo, los alumnos disfrutarán de una dinamización teatral que les introducirá en el placer de la letras y la lectura (a cargo de la empresa Piratas de Alejandría), al tiempo que está prevista la visita de los autores del libro, Ana Alonso y Javier Pelegrín, «que les hablarán con más profundidad de su obra y podrán conocer de primera mano las impresiones de sus lectores», explica el Ayuntamiento de Casariche.

Otra de las posibilidades que ofrece el programa es el “Book Crossing” o “Libros libres”, que permitirá conocer obras que “vuelan libres” de unas manos a otras, en un intercambio consistente en que los libros pasen de mano en mano y puedan ser leídos por un mayor número de personas. «El placer de leer» apoya la dinamización a la lectura y la creación de espacios o clubes de lectura, en los que los jóvenes puedan compartir aprendizajes y sutilezas de los libros que vayan leyendo.

Además de en Casariche, este programa de dinamización lectora se está celebrando en otros municipios de la Sierra Sur de Sevilla como es el caso de Estepa.