El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha dado el visto bueno definitivo al segundo plan de ajuste presentado por el Ayuntamiento de Osuna el pasado mes de junio, tras incluir en él nuevas medidas exigidas por el gobierno central en los capítulos de ahorro del gasto corriente, de personal y de ingresos.

Osuna ha sido el único municipio de la provincia de Sevilla que ha obtenido una resolución favorable tras el nuevo plazo dado por el gobierno de Madrid para que fueran revisados, una aprobación de la que la alcaldesa de Osuna, Rosario Andujar, ha comentado que “con ella lo que se evita es generar graves problemas en la hacienda municipal al no vernos sometidos a una retención del 50% de las participaciones de los ingresos del Estado (PIE), lo que, definitivamente supondría una importante eliminación de servicios públicos, una disminución de las condiciones laborales y una reducción de la plantilla local”.

No obstante, la alcaldesa de Osuna, ha argumentado que “con el decreto que obliga al pago a proveedores, desde el gobierno central siguen interviniéndonos y limitando al máximo nuestras actuaciones, al establecer como condiciones que la deuda que tenemos contraída sea pagada en 10 años al 6% de interés y además sin posibilidades de cambio o de modificación alguna, frente al 1% que es el interés que la banca paga por el dinero prestado. Todo un negocio para la banca”.

En cuanto a las nuevas medidas que ha habido que establecer en este nuevo plan de ajuste, Rosario Andujar ha manifestado que “se ha hecho un gran esfuerzo para gravar en la menor medida posible al trabajador municipal y para evitar cualquier reducción de plantilla”.

A pesar de esto, la alcaldesa de Osuna entiende que la postura de los sindicatos sea desfavorable a este plan “puesto que, y esta vez sí que es por imperativo legal, hemos tomado medidas que afectan a la reducción de una serie de prestaciones sociales adquiridas por los trabajadores. Medidas que son totalmente injustas pero que, obligatoriamente teníamos que tomar.”

En este sentido, Rosario Andujar ha destacado que “no ha habido reducción de plantilla ni tampoco se ha tocado los salarios de los trabajadores, buscando otras medidas que no nos lleven a la decisión que han tomado otros ayuntamientos como es el despido, que sí nos parece que es cortar la trayectoria profesional de una persona cuyos ingresos hoy son fundamentales dentro de su unidad familiar”.

En cuanto a las medidas que el Ayuntamiento de Osuna se ha visto obligado a tomar para hacer frente al cumplimiento de ese plan de ajuste, Jiménez Pinto ha explicado que “para hacer frente a ese préstamo, este Ayuntamiento tiene que ahorrar 2 millones de euros más en los próximos dos años de lo que recaudamos actualmente”, ahorro que ha destacado que se llevará a cabo desarrollando una serie de actuaciones en varios apartados municipales.

El Ministerio de Hacienda obliga a reducir en un 10% los gastos destinados al capítulo de personal, gastos que se van a intentar a ahorrar con la reducción del número de horas extras y de gratificaciones, la reducción de nuevas contrataciones, la no reposición de nuevo personal tras las jubilaciones de empleados, la supresión temporal del complemento de la productividad, la reducción de las prestaciones sociales y la bajada en un 5% de la nómina de los concejales, y una misma bajada en la asignación concedida a los grupos políticos de la corporación municipal.